Ejercicio físico: ¿puedo hacerlo sin gastar?

¡Claro que sí! El gimnasio, los grupos de entrenamiento y los personal trainer han convertido al ejercicio diario en una actividad rentable y exclusiva.

Pero, ¿es realmente necesario pagar para ejercitarse o mantener la constancia del entrenamiento? En esta publicación, vamos a mostrarte cómo puedes incluir el ejercicio en tu vida diaria, sin necesidad de gastar dinero.

Para eso, será necesario que cambies algunas costumbres. Pero tranquilo ¡será para mejorar tu bienestar y verás los resultados rápidamente!

Deja el auto, camina a tu destino o usa la bicicleta

En las grandes ciudades, andar en auto es la forma de movilizarse por excelencia. Es cómodo, está disponible sólo para nosotros y nos lleva de forma rápida a nuestro destino.

Pero la verdad es que no es nada bueno para nuestra salud física. Por eso, un primer paso para incorporar el ejercicio en tu vida, es dejar el auto en tu casa y salir a caminar o usar la bicicleta para llegar a tus destinos cotidianos. 

Si bien puede parecer un pequeño cambio, incorporar esta práctica puede marcar una gran diferencia en tu nivel de actividad física diaria. Además, te ayudará ahorrar dinero en combustible o transporte público. 

Haz ejercicio en casa con tu propio peso corporal

Otra forma de mantenerte activo sin gastar es hacer ejercicio en casa utilizando tu propio cuerpo como herramienta. 

Los ejercicios de peso corporal, como las sentadillas, las flexiones, los abdominales y las zancadas, son altamente efectivos para mejorar la fuerza, la resistencia y la flexibilidad. 

Si no sabes por dónde empezar, puedes descargar aplicaciones móviles con rutinas preestablecidas o buscar videos en Youtube de clases, ejercicios o rutinas diarias. Lo más importante es que consigas incorporarlo a tus rutinas diarias, aunque sea 30 minutos. Recuerda que la clave es la constancia y persistencia. 

Aprovecha los parques y espacios públicos

En todas las ciudades existen parques y muchos están equipados con circuitos para caminar, correr o incluso con aparatos de gimnasia al aire libre. 

¡Son gratis, aprovéchalos! Puedes establecer tu propia rutina de ejercicios o unirte a grupos de entrenamientos que ejerciten en estos espacios. Además, son ideales para combinar ejercicios de cardio (correr o trotar) y ejercicios de resistencia. 

¿Eres tímido? Entonces, organiza una salida con tus amigos o familiares para correr, caminar o trotar. Estas actividades son una excelente forma de socializar y disfrutar del tiempo libre.

Establece metas y mantén un registro de tu progreso

Si lo que quieres es incorporar el ejercicio a tu rutina diaria, es fundamental que establezcas metas. Esto te permitirá hacer consciente tus logros y te motivará para conseguir nuevos objetivos. No necesitas comprar un costoso reloj inteligente o aplicaciones de pago para hacer un seguimiento de tu progreso. 

Escribe tus progresos en una libreta, usa el calendario de tu celular o descarga una aplicación gratuita. Con estas herramientas, puedes dejar constancia de tus logros y  mantenerte motivado.

Por ejemplo, puedes iniciar con una caminata diaria. Luego, sumar algunos ejercicios en tu casa 2 o 3 veces por semana. Si cumples con la rutina y quieres agregar nuevos desafíos, puedes aumentar la intensidad o la duración de tus sesiones.  

Utiliza objetos del hogar como herramientas de ejercicio

Si te gusta la idea de entrenar con pesas o resistencia, pero no quieres gastar dinero en equipo especializado, puedes utilizar objetos cotidianos que ya tienes en casa. 

Los profesores de gimnasia sugieren utilizar botellas de agua, bolsas de arroz u objetos pesados. Este peso puede ser un gran cambio para tu cuerpo, fortaleciendo tus brazos y piernas. También puedes usar una silla para hacer ejercicios de step-up o trabajar tus tríceps.

La clave está en ser creativo y utilizar lo que tienes a mano. No es necesario comprar mancuernas ni equipos de última tecnología para obtener resultados. Con un poco de imaginación, puedes crear una rutina variada y desafiante.

Algunas ideas finales…

Hacer ejercicios nunca fue algo costoso, simplemente, la vida moderna ha encontrado la forma de complicarlo. 

Por eso, si quieres realmente convertirlo en parte de tu vida ¡empieza con pequeños cambios! Una vez que conviertas estas actividades en rutina, se volverán hábitos y habrás logrado una mejor calidad de vida, sin gastar dinero.

No importa si empiezas poco a poco, lo relevante es que te mantengas en movimiento y te propongas cuidar de tu salud física y mental. Así que, ¡no esperes más! Este es el momento para comenzar.